Teo y Manu en el último revuelto del trazado
Comenzamos a rodar por Santiga y el rio Ripoll para ir aumentando paulatinamente el ritmo. Ya en Castellar Vell comenzaba la primera subida del día, corta pero intensa por el monte de Mont-rodó pero sin llegar a la cima. A continuación bajábamos hasta Matadepera para esta vez sí, zigzaguear la cantera restaurada del Turó de les Roques Blanques.
Mis coleguillas Fernan y Manu divisan el paisaje desde lo mas alto
Desde la cima del Turó se puede divisar gran parte de Terrasssa
Tras el descanso y avituallamiento proseguíamos la marcha trialerando el Turó por la otra cara y rodando por el río y el bosque de Matadepera. Pero en el último desvío a la izquierda a la ermita de Sant Juliá un fallo de apreciación me hizo seguir recto para plantarnos en Ca n'Oriac. Tras cruzar el barrio de Sabadell bajamos desde el campo de fútbol de Can Déu hasta el río Ripoll para continuar la marcha por Santiga y Sta Perpetua tras 53 kilómetros.
Por el camino nos encontramos a Juanfel, Rose y su niña que pinta maneras.
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